Encontrar en algún lugar tanta síntesis y tanto contenido me asombró hasta en lo más hondo de mi corazón.
Porque hay dos factores que confluyen permanentemente y ...me pareció...uno se eleva por sobre el otro, la presencia del hombre y la gloria de lo natural.
La intervención humana en Alaska es variada y bastante profusa.
Yo me dediqué más a buscar las razones y las motivaciones de los protagonistas de la Fiebre del Oro.
Cuando miraba hacia arriba de las montañas , me parecia increible que familias enteras, adultos ,niños y mascotas con las pocas posesiones terrenales que disponían, hubieran emprendido ese camino al infinito, cruzado por riesgosos pasos , clima extremo y criaturas salvajes,....en una loca tómbola de la fortuna .
Una idea brillante como el oro, pero fatua.
Lo cierto es que corría el año 1896, la situación en EEUU era difícil y el desempleo abundante.
La fantasía de lograr riquezas en las venas de oro descubiertas enloqueció a muchos que emprendieron la cruzada.
Solo muy pocos llegaban y los senderos abiertos ...así como los del Everest, guardaron a sus muertos.
El bien y el mal campaban juntos en aquellos pueblitos de madera, alejados de la mano de Dios, en donde sólo valía encontrar algo de esperanza en aquellas orillas ...y en las que el brillo finalmente les llegaba a unos pocos.
Entonces la imagen del espejo....mostraba la cara de la humanidad que a uno le entristece.
Pero......¡no!
Alaska es chispeante y divertida, sus habitantes han logrado la síntesis maravillosa entre lo humano y la naturaleza, una síntesis tan pura como el corazón del hielo, intacta , profunda.
Ahí, el espejo floreció, me devolvió un respeto que pocas veces he visto por la naturaleza, una comunión entre la creencia y lo cotidiano.
Nosotros agradeciendo a la naturaleza, y la idea, de que ella ..en fin como lo digo......es mucho más poderosa y por esto....también más misericordiosa.
Ellos dicen....esta mañana brillante dos focas se dejaron cazar por mi.
La idea de la naturaleza pródiga y proveedora .
Y aceptan las catástrofes quizás con la misma calma, ya que si la naturaleza se expresa...por algo será.
Entre verdes y azules oscuros, montañas y valles.
Alaska es una maravilla que detona el alma.
Yo que no soy mucho de Iglesias o Catedrales, encontré el lugar donde habita Dios....en l silencio de las cumbres, en el sonido del agua que corre por los arroyos, en el susurro del viento en las hojas de los bosques.
En esa armonía perfecta entre cuerpo y espíritu ,como un concierto de notas jamás ejecutadas por seres humanos.
El arte de los inuits es totalmente naif y de una calidad de materiales...excelsa.
Escenas cotidianas de la vida representadas con dinamismo y humor.
Los dibujos de Rie Muñoz, una artista de Alaska...
Y en cuanto al humor.....parece que la sintesis naturaleza-hombre les funciona.
En Talkeetna, el gobierno de EEUU llamó a elecciones para alcalde.
Los habitantes no veían con cariño a ninguno de los representantes...y eligieron a Stubbs, un gato naranja que reinó a sus anchas durante muchos años, provocando una sana envidia a los seres como yo que dentro suyo guardan un poco de rebeldía antes las normas impuestas.
En los links encontraras la historia, paso a paso, la deep Alaska y ¡ te zambulliras en un baño fresco de naturaleza viva!!!!!
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