Para no romper el fino hilo de la buena onda, ese que nos protege de alguna forma de las desventuras del mundo entero, hoy hablemos de Nueva Zelanda, la tierra de los sueños , los cumplidos y los por cumplir.
Es la tierra que soñó Tolkien cuando imaginó La Comarca, tan bien representado que dan ganas de entrar y quedarse a vivir en ese sueño en donde toda la fantasía es posible.
La campiña es extraordinariamente verde , manchada aqui y alla con el blanco de sus ovejas.
¿Saben cual es la sensación que me produjo Nueva Zelanda?
La de surfear una ola muy suave y amigable y dejarme conducir , todo easy .
Entre las canciones maoríes y el buen humor ...esa sensación de bienestar que te va acompañando en el viaje.
Aun en las ciudades, Auckland y Christchurch, la sensación fue la misma.
El espejo devolvía una imagen cálida de bienvenida y dos civilizaciones bastante amalgamadas entre sí.
Una imagen tranquilizadora en tal caso.
Habrán tenido lo suyo sin duda, pero todo parecía fluir con facilidad entre ellos y se notaba .
También el Pacífico.......como pasó en Canadá.
Es un lugar en donde la imaginación te vuela...vendría a vivir acá sin dudarlo y emprendería...tal o cual proyecto.
La idea de haber encontrado un lugar todavía no contaminado para concretar aquello que siempre quisimos.
Tanto la isla norte como la isla sur tiene paisajes infartantes .
La visita al Monte Cook y el Lago Tekapo fue como pasar de la polinesia a Suiza.
Hace muy poco, los científicos y geólogos descubrieron un tipo de rocas de más de 1300 millones de años...y suponen que debajo de Nueva Zelanda, puede estar el continente perdido de Zelandia.
Sea como fuere, la buena onda sigue presente en las alturas.
El Océano Pacífico, nombrado así por Magallanes , con aguas más cálidas que el Atlántico por ejemplo, parece tener efecto .
Hoy por hoy, tiene problemas de calentamiento climático, y también de sobrepesca.
Tierra en estado silvestre, tierra de sueños y de grandes escenarios, de fantasía y de imaginación.
Respeto por la naturaleza, respeto por los ancestros más allá de la colonización inglesa respeto por las tradiciones.
Tan natural una cultura junto a la otra.
Según la historia, Tāne Mahuta convocó a todas las aves para ayudarlo a subir al cielo. Sin embargo, solo el kiwi respondió a su llamado. Cuando llegaron al reino celestial, Tāne Mahuta decidió premiarlo con plumaje hermoso y alas largas como las demás aves. Pero el kiwi declinó amablemente porque prefería quedarse en tierra para protegerla durante la noche.
Esta historia simboliza el coraje del kiwi y su dedicación hacia su entorno natural. También resalta valores importantes en la cultura maorí, como ser fiel a uno mismo y cuidar del hogar ancestral.
El kiwi, símbolo Nacional para los maoríes...y también para los ingleses.
En el link de abajo...nuestro paso por Auckland, Rotorua y las Tierras Medias!
En este , la subida al Monte Cook y el Lago Tekapo.
Kia Ora!
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