Quebec tiene un lema Je me souviens que en buen cristiano es Yo me acuerdo.
Esta frase está escrita en arriates de flores en los parques, en carteles, en las patentes de los autos, en las bolsas de regalos, los papeles de envolver….en todos lados.
Quebec tiene su marca, su propósito, su conciencia .....en esas palabras.
Cuando le pregunté a nuestro amable guía qué significaba finalmente , me explicó, es recordar de dónde venimos, cuáles son nuestras raíces, cómo llegamos hasta aquí.
En esa visita nos fue paseando por la historia, por Champlain , por sus batallas, al tiempo que caminábamos sin parar.
La idea que transmiten esas tres palabras, me dejó una profunda marca y un amor loco por ese lugar, capaz de ser conscientes del aquí y ahora, pero recordando a cada paso de dónde surgieron.
Desde el Chateau de Frontenac hasta la Petite Champlain , desde las vistas del Río San Lorenzo hasta la Ciudadela, todo es precioso y te dan ganas de quedarte a vivir en ese lugar, francés pero también Huron.
Ahí , mi querido partner acota…que se congela todo en invierno y hace un frío que pela.
Muy cierto. Pero en Quebec al menos la electricidad es baratísima, y todo funciona a base de energía eléctrica.
Pero quería más, quería meterme en la historia todo lo que pudiera, porque de eso se trata viajar, de aprender in situ.
Nos subimos a un bus de línea que nos llevó a la comunidad Huron-Wendat.
Un lugar que recrea la antigua vida de los pobladores, su costumbres , sus ritos, su sabiduría.
Finalmente, su adaptación a la nueva civilización, al catolicismo.
Tiene su primera Santa Nativa, Kateri Tekakwitha, una capilla lindísima en medio de la comunidad.
Pero todavía me faltaba más.
Hicimos un alto en una cascada muy bonita y estrepitosa y cruzamos la calle hasta un café muy bien puesto. No había nadie más que nosotros.
Le pedimos al joven que nos atendió un café con crema.
Resultó ser el dueño y parte de la comunidad.
Y se puso a hablar en español con mucha amabilidad y a contarnos la historia de su comunidad.
Steven, cursó estudios de economía y volvió a ayudar a otros en proyectos y planes de trabajo.
El lugar, precioso, tiene una oficina desde donde asesora y arma planes de negocios para que otros miembros de su comunidad salgan adelante y logren independencia.
Hoy seguimos en contacto.
Nada es casual ,creo que uno encuentra lo que va buscando.
Y nosotros encontramos en Steven una partecita de la historia que él nos mostró tan cálidamente.
Je me souviens
De dónde vengo,
Adónde ir
A quiénes amo, a quién perdí